Habitantes de San Miguel Canoa manifestaron su rechazo a la conformación de “guardias comunitarias” e indicaron que hace tiempo dejaron de ser el pueblo salvaje de 1968, e indicaron que el edil auxiliar fomenta una imagen de terror entre la población.
En rueda de prensa, el movimiento Unidos por Canoa, a través de Germán Luis Pérez López, señaló que el problema de la inseguridad no es tan grave como lo asegura el presidente auxiliar Raúl Pérez Velázquez y sólo requiere reforzarse la seguridad pública pero dentro del marco legal.
Acompañado de vecinos y un regidor, advirtió que se quiere crear un grupo de choque armado que podría atentar contra la población, además de que se trata de una acción que está fuera de la norma legal.
Pérez Luis indicó que el San Miguel Canoa de 1968 quedó en el pasado y no se puede dar la imagen al exterior de que se trata de un pueblo violento donde no se puede transitar.
Indicó que como en toda comunidad hay problemas, como personas que alteran el orden, pero hasta ahora no se han suscitado hechos graves.
Los habitantes solicitaron que se realice una investigación al manejo de los recursos del presidente auxiliar toda vez que no ha transparentado el uso de los mismos y desde el mes de mayo, cuando tomó posesión, no ha presentado un acta de Cabildo.
Señalaron que van a pedir a la Secretaría General del ayuntamiento que comience el proceso para destituir al funcionario, que tiene trabajando y cobrando a su esposa como secretaria, secretaria general y presidenta del DIF. Insistieron en que se haga una auditoría a la junta auxiliar, a fin de que se conozca el destino de los recursos.
Por su parte, el presidente de la Comisión de Seguridad Pública en el Congreso de Puebla, Francisco Rodríguez Álvarez, convocó a los habitantes de las juntas auxiliares para que se acerquen a la autoridad municipal para solicitar que se refuerce la vigilancia en sus demarcaciones y evitar caer en actos ilegales con la conformación de grupos de "policías comunitarias".
Luego de que en San Miguel Canoa su autoridad advirtió que ante la creciente inseguridad en el lugar se crearían grupos de vigilancia, el legislador local criticó esta postura y afirmó que, por el contrario, se agravaría la situación.
Explicó que los ediles auxiliares tienen la posibilidad de solicitar la intervención de la Policía Municipal e incluso que, por acuerdo de Cabildo, puedan recuperar la facultad sobre los cuerpos policiacos.
En este sentido, dijo que al tener a su cargo a los elementos podrían aplicar las pruebas de control y confianza, además de que podrían portar armas con el permiso respectivo emitido por la Secretaria de la Defensa Nacional (Sedena).
Confío en que los presidentes auxiliares acudan con sus respectivas autoridades municipales para acordar la forma en cómo se otorgará el servicio de seguridad pública en sus demarcaciones y evitar violentar la ley.
