Las tecnologías digitales han pasado de ser una herramienta más en los campos tradicionales de la política cultural, a conformar un terreno del desarrollo cultural en sí mismo y a la vez un ámbito de acción transversal para su conjunto, aseguró Rafael Tovar y de Teresa, presidente del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta).

En la inauguración de la XVII Conferencia Iberoamericana de Cultura, que se lleva a cabo en el Salón de Recepciones del Museo Nacional de Arte (MNA), el funcionario cultural mencionó que el Internet no es sólo un medio, sino también una nueva cultura; “eso que hoy llamamos cultura digital”, anotó.

Destacó que México tiene un profundo convencimiento sobre esta transversalidad de lo digital y la necesidad de incorporarla a la acción cultural. Como muchos de los países de la región, desde hace por lo menos tres lustros cuenta con una agenda digital nacional.

Sin embargo, dijo, la definición y la coordinación de esta agenda han sido básicamente competencia de la Secretaría de Comunicaciones, y es hasta la actual administración Federal que estas tareas son asumidas directamente por la Presidencia de la República, que ha creado para ello la Coordinación de Estrategia Digital Nacional, reconociendo que el desarrollo y la adopción de las tecnologías de información recorre todos los sectores, explicó Tovar y de Teresa.

La Estrategia Digital de México, detalló, comprende cinco principales objetivos: transformación gubernamental; economía digital; educación de calidad; salud universal y efectiva, y seguridad ciudadana.

Asimismo identifica cinco condiciones indispensables para lograrlos: conectividad; inclusión y habilidades digitales; interoperabilidad; marco jurídico, y una política de datos abiertos.

“De acuerdo con estas directrices de la planeación del Gobierno de México, por primera vez, un programa nacional de cultura incluye un capítulo específico sobre el desarrollo de la cultura digital, el cual se suma en igualdad de importancia a los campos tradicionales del patrimonio cultural, la educación y la creación artística”, señaló.

Subrayó que la Agenda, que coordina y desarrolla el Conaculta, constituye el primer plan rector en la materia dentro del sector cultural, y se articula alrededor de seis objetivos o campos de acción principales:

La digitalización del patrimonio cultural; la generación de contenidos a partir del material digitalizado y la creación de plataformas para su acceso, y el desarrollo de servicios basados en tecnología digital dentro de los espacios culturales, como museos, foros escénicos y bibliotecas.

Así como la difusión y comunicación de la actividad cultural; el fomento de la experimentación y la creatividad, tanto en el vasto espectro del arte de los nuevos medios, como en el diseño de las aplicaciones, y el apoyo a la vertiente digital de las industrias culturales y creativas.

En su oportunidad, Álvaro Marchesi, director general de la Organización Iberoamericana para la Educación, la Ciencia y la Cultura, habló sobre el termino de su mandato:

“A fin de año concluyo mi mandato y la asamblea de Ministros de Educación eligió por unanimidad a Pablo Spellier, de Brasil, entonces creo que mantendrá las excelencias relaciones con los países Iberoamericanos”.

También dijo que en la asamblea de la XXIV Conferencia Iberoamericana de Ministros de Educación aprobaron una resolución de fortalecer, crear y participar una coordinación estratégica de todos los organismos Iberoamericanos, que fue aprobada por los Ministros de Educación.

“Es una coordinación estratégica para combinar y apoyarnos mutuamente, y para utilizar los recursos de una manera compartida, a fin de definir funciones y acciones”, apuntó Marchesi.