Con una misa en catedral, donde se ordenaran nueve sacerdotes, se celebrará el 370 aniversario del Seminario Mayor Palafoxiano, que cuenta con la mayor población estudiantil en los últimos 30 años, pero sólo 30 por ciento de quienes ingresan llega a la meta final, indicó el arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa.

El arzobispo indicó que la mejor celebración es ordenar nuevos siervos de Iglesia, y serán Mauricio Alberto Ramírez, Juan Antonio Pérez, Enrique Tlaseca Carbajal, Néstor Cuautle Xicale, Ernesto Junior Martínez Avelino, Abelmain Espinoza Peñafort, Artemio Javier López Tetla, José Joaquín Salazar Sánchez y Daniel Sánchez Carrizosa.

Explicó que los nuevos sacerdotes se irán al interior del estado o a acompañar a sacerdotes de edad avanzada que pronto tendrán que retirarse. 

Sobre la actividad en el seminario, Sánchez Espinosa informó que se inició el ciclo escolar con cerca de 300 seminaristas, y recordó que el año pasado se dio la apertura de otro Seminario en Izúcar de Matamoros, pero comentó que este aún carece de instalaciones propias, además de que el número de alumnos era bajo.

Indicó que en la formación de estos sacerdotes para la región Mixteca de Puebla se pedirá que los alumnos hablen las lenguas que se mantienen en esas comunidades, tal como sucede con los seminaristas que se forman en el seminario de Zaragoza, en la Sierra Norte.

Recordó que el papa Francisco ha pedido a los sacerdotes que vayan a las comunidades, que sigan los ejemplos de ser peregrinos y la mejor forma de llegar a la gente es conocer su cultura, sus costumbres y llevarles la palabra y la fe.

Sánchez Espinosa recordó al fundador, el beato Juan de Palafox, quien no sólo construyó un seminario, sino que colaboró para la construcción de una ciudad y su legado se ha mantenido durante casi cuatro siglos.

Una difícil actividad
El líder de la grey católica en Puebla manifestó que el ser sacerdote lleva una formación de más de 10 años, por lo cual sólo 30 por ciento de quienes ingresan al seminario es ordenado; una carrera universitaria tiene una duración de cinco años.

Sin embargo, comentó que después de Jalisco y el Distrito Federal, la arquidiócesis es la de mayor número de vocaciones sacerdotales en el país, aunque no permiten abatir el déficit que existe, ya que hay sacerdotes a punto de retirarse.

La historia
El 22 de agosto de 1644, el beato Juan de Palafox y Mendoza, de acuerdo con la Cédula Real del 14 de julio de 1643, firmada por el rey de España Felipe IV, con la cual se pretendía llevar a cabo el mandato del Concilio de Trento, de fundar seminarios para la formación de los futuros sacerdotes, fundó canónica, jurídica y económicamente el Seminario Tridentino de Puebla.

Con lo anterior, concretó esfuerzos anteriores como los logrados por su antecesor, Diego Romano, quien en 1604 fundara el Colegio de San Juan, en la ciudad de Puebla. El obispo Palafox ubicó sus colegios en la actual 5 Oriente número 3, a un costado de la catedral.

Un siglo después, Domingo Pantaleón Álvarez de Abreu (1743-1763) funda el Colegio de San Pantaleón para Teólogos, ya que los edificios existentes no eran suficientes para el número de estudiantes. Desde entonces, hasta mediados del siglo XIX, el seminario comprendía cuatro colegios, a saber: el Colegio de San Pedro, el Colegio de San Juan, el Colegio de San Pantaleón y el Colegio Clerical de San Pablo. Este conjunto académico fue denominado como Colegios Palafoxianos.

En 1867, con la promulgación de las Leyes de Reforma, el Seminario Palafoxiano fue despojado de sus colegios, inmuebles, maestros y alumnos. Pero resistiendo a la adversidad, en 1870 se instala en los anexos del templo de San Juan de Letrán, mejor conocido como el Hospitalito.

Algunos años después, en 1907, bajo la guía pastoral de Ramón Ibarra y González, el seminario fue elevado a la categoría de Universidad Pontificia, con el nombre de Universidad Católica Angelopolitana.

En 1915 las clases continuaron en casas particulares. En 1916 se ubicó en vario sitios: en el antiguo Colegio del Portalillo, a un costado del Teatro Principal; en casas cercanas al templo de San Pablo de los Frailes y en la casa que hoy alberga a enfermeras y paramédicos en la Cruz Roja, en el paseo de San Francisco. El 13 de diciembre de 1919 el Seminario se traslada a la 9 Oriente 5, en el antiguo colegio jesuita del Sagrado Corazón, donde permaneció hasta el 6 de agosto de 1964 cuando formadores y alumnos se trasladaron a la exgarita de Amozoc, entre las colonias el Porvenir y Joaquín Colombres.