Decenas de kilómetros de carreteras federales y estatales en Puebla se mantienen en mal estado, sin un peso de inversión en mantenimiento, lo que ha generado protestas de parte de vecinos en distintos puntos de la entidad.

Las protestas versan en el sentido de que el gobierno de Rafael Moreno Valle Rosas invierte la mayor parte del erario en la capital y descuida las carreteras; en tanto, el Gobierno Federal no invierte en el mantenimiento.

Un total de 226 kilómetros de carreteras federales que cruzan por Puebla se encuentran en malas condiciones y se clasifican como “no satisfactorias”, según el último reporte en enero de la Dirección General de Conservación de Carreteras de la Secretaría de Comunicaciones Federal.

El gobierno de Puebla, a través de la Secretaría de Infraestructura, no tiene publicado ningún reporte de la situación de las arterias viales a su cargo.

En la zona de la Sierra Norte existen arterias viales en muy mal estado, algunas afectadas por las lluvias desde el año pasado, además de que en la zona del volcán Popocatépetl los caminos no son los adecuados para una evacuación en caso de una contingencia, según los vecinos.

Por ejemplo, en la zona de Ayotoxco de Guerrero acusan a la diputada local del Partido Acción Nacional (PAN), Corona Salazar Álvarez, de burlarse de los habitantes al acudir a tomarse la foto y anunciar inversiones “fantasmas”.

Esta semana en el kilómetro 25 de la carretera a Ayotoxco un grupo de ciudadanos acusaron a Salazar Álvarez y al gobierno del estado de Puebla por las malas condiciones en las que se encuentra su carretera. Pero también arremetieron contra los presidentes municipales de la zona por no exigir al gobierno de Moreno Valle su intervención para rehabilitar esta carretera.

Mencionaron que esta vía de comunicación es muy importante para ellos, ya que es un polo de desarrollo y al tener una carretera con estas condiciones de baches, sus productos y servicios se estancan, destacó el medio local La Voz de Teziutlán.

Los vecinos cerraron la carretera y colocaron pancartas en contra del mandatario estatal, donde se podían leer leyendas como: “Que esperas la grande”, “Lo que vivimos hoy es claramente acción de un gobierno dictatorial”.

Los quejosos mencionaron que en épocas de lluvias han provocado deslaves y derrumbes en esta carretera estatal.

“(…) basta con recorrer este lugar para ser testigos de que hay mucho bache, es más, parece camino de terracería y el gobierno en turno no tiene para cuando empezar los trabajos ya que solo acudieron a tomarse la foto y anunciar la inversión”, señalaron.

“Estando en campaña la diputada local de Teziutlán, Corona Salazar Álvarez, tomó como bandera política re encarpetar la carretera estatal Hueytamalco. Tenampluco y no cumplió”, acusaron.

Inclusive, documentaron cómo un árbol fue creciendo justo en medio de la carretera, ante la falta de mantenimiento, lo que obviamente es un peligro para quienes pasen por la zona serrana de Puebla.

El reporte
Según el último reporte de la Dirección General de Conservación de Carreteras de la SCT publicado en enero, un total de 226 kilómetros de carreteras federales que cruzan por Puebla se encuentran en malas condiciones.

Por lo mismo las arterias viales se clasifican como "no satisfactorias", según el último reporte de la Dirección General de Conservación de Carreteras.

Por Puebla atraviesan 42 tramos federales, de los cuales 31 presentan algún tipo de deterioro catalogado como “no satisfactorio”, mientras que los demás tienen condiciones de “buenas” a “satisfactorias”.

En el análisis se evaluaron mil 93 kilómetros de los tramos federales que pasan por la entidad, cuya red tiene un total de 5 mil kilómetros.

Las carreteras más dañadas se encuentran en la carretera Puebla-Huajuapan de León, por Izúcar de Matamoros, con 39 kilómetros dañados; le sigue la carretera Pachuca-Tuxpan con 36 kilómetros en malas condiciones.

Asimismo, la carretera Oriental-Teziutlán presenta 17 kilómetros malos, el tramo Tecomatlán-Tulcingo mantiene un kilómetro dañado y la Apizaco-Tejocotal suma 11 kilómetros en malas condiciones.

En la vía Puebla-Tlaxcala se detectaron nueve kilómetros en malas condiciones, mientras que en la Teziutlán-Nautla se ubican 17 kilómetros malos.

En la ruta El Mohón-Hueytamalco existen cuatro kilómetros dañados y en la Amozoc-Oriental siete kilómetros no satisfactorios.

Además, la Puebla-Huajuapan de León, en el tramo Atlixco-Izúcar de Matamoros, tiene 10 kilómetros afectados.

Zona del volcán
En mayo de 2013, Intolerancia Diario documentó durante un recorrido por la zona del volcán Popocatépetl cómo los baches, caminos angostos, vados y falta se señalizaciones mantienen en preocupación a sus habitantes.

A un año de distancia, en esta zona de las faldas del volcán Popocatépetl, que ha sido olvidada por las autoridades, la de la región de Tochimilco, las cosas siguen exactamente igual.

En el recorrido por distintas rutas de evacuación se comprobó el mal estado de la cinta asfáltica y mala planeación de las carreteras, las que en caso de una contingencia dificultarían una evacuación masiva.

Esta parte de las faldas del volcán se encuentra en otro punto distinto a los poblados que han cobrado fama, como San Nicolás de los Ranchos, San Pedro Benito Juárez o Santiago Xalitzintla, donde se enfocan los esfuerzos de protección civil.

Pero a diferencia, comunidades como Santiago Tochimizolco, Santa Cruz Cuautomatitla, Santa Magdalena Yancuitlalpan, San Juan Tejupa o San Miguel Ahuacolican se encuentran abandonadas u olvidadas por las autoridades.

La gran mayoría de las decenas de kilómetros de las rutas de evacuación ubicadas entre barrancas de esta zona se caracterizan por su angostura, donde solo puede circular en un solo sentido un automóvil a la vez.

“Ni para dónde correr”, dijo preocupado Víctor Ramírez Vázquez, dirigente de la Unión Campesina Democrática Regional.

Explicó que por la geografía de la zona, los vecinos están construyendo un camino alterno que cruza de San Juan Amecac, San Mateo, Los Reyes, hasta el municipio de Tepexco, el que evita más de 50 minutos de pasar por barrancas.

Pero esta construcción es pagada por ellos mismos, camino que los pobladores están abriendo por sus propios medios, el cual ya se encuentra en terracería.

En el primer punto ubicado en Santa Magdalena Yancuiltlalpan, la carretera es tan angosta que en uno de los puntos fue imposible cruzar cuando otra camioneta viajaba en sentido contrario.

Un grupo de campesinos, la mayoría mujeres y personas de edad avanzada, señalaron que las autoridades siempre alegan que en caso de contingencia todos los vehículos irían en un solo sentido, por lo que no habría problema.

“Pero imagínese que se descomponga un solo carro, que de por sí los de por aquí muchos no están en buen estado, o con que a una sola persona se le ocurra ir en sentido contrario para recoger a algún familiar”, dijo una de las mujeres angustiadas.

La mayoría de los caminos fueron construidos en el sexenio de Manuel Bartlett Díaz, los cuales desde entonces no han recibido mantenimiento, sólo se han tapado baches en el mejor de los casos.

Severiano Romero Adorno, vecino de la comunidad de Santa Cruz Cuautomatitla, explicó que las autoridades de Protección Civil no llegan a la zona, por lo que no han recibido ni una plática informativa.

Ante la situación no se han quedado con las manos cruzadas y ellos mismos han creado su señalética de evacuación, la que en su mayoría fue hecha a mano con pintura en láminas distribuidas en distintos puntos de los poblados.

La poca señalética oficial que existe ya se encuentra muy deteriorada, en la mayoría de los casos ya despintada o hasta doblada por el paso de los años.

Lo que sí se puede notar por todos los poblados es la propaganda política ante las elecciones del 7 de julio, la que abunda, a diferencia de las señales de las rutas de evacuación.

“Si las autoridades ya hubieran venido se hubieran dado cuenta de la situación y al menos las señales ya las hubieran cambiado, pero ni eso”, dijo.

Asimismo, comentó que los vecinos se han organizado en la creación de grupos de protección civil, para auto protegerse, y son quienes han estado al pendiente de la situación del volcán.

Señalaron que la ayuda se está centrando en comunidades más grandes olvidando a por lo menos 30 comunidades más pequeñas como juntas auxiliares y comisariados, como las señaladas.

Para llegar a localidad de San Miguel Aguacomulican, perteneciente municipio de Atzitzihuacan, se tienen que sortear cerros, barrancas y una larga carretera estrecha con voladeros.

La carretera no mide más de tres metros de ancho, por lo que al encontrarse con un carro en sentido contrario, se tiene que hacer alto total para que uno de los dos autos pase.

Pero además tiene de división una línea amarilla, como si fuera broma. “La línea ha de ser para que pasen dos burros o dos bicicletas”, dijo uno de los campesinos en broma.

Aguacomulican tiene mil 16 habitantes, según el último censo. En este lugar la pobreza es extrema, la que es notoria por las viviendas.

Floriana Morales Castillo, presidenta auxiliar de esta población, pidió se arregle la carretera que comunica a lo que llamó “un pueblo abandonado.

”Pedimos que nos arreglen la carretera, pero tampoco tenemos agua, a mi me gustaría que él se presentara (Rafael Moreno Valle) y que viera cómo vivimos, cómo estamos, vivimos muy abandonados.

”Que vea los problemas le pido al gobernador que nos visite, somos un pueblo abandonado, que nadie se acuerda de nosotros. San Miguel, estamos a penas a 18 kilómetros del cráter”, dijo.