En los últimos cuatro años, la propaganda gubernamental está enfocada en patentizar que todas las obras morenovallistas se realizan “sin pedir un peso prestado de deuda”.
Sin embargo, en la realidad económica y de las finanzas públicas sucede todo lo contario. De acuerdo a un análisis del economista Alejandro Chávez Palma, a principios del sexenio la deuda per cápita alcanzaba los mil 600  pesos; ya ahora se ubica en mil 700 pesos per cápita.
Eso significa que se incrementado. Y que esa leyenda de obras sin pedir un peso prestado, está en entredicho.
De acuerdo a la publicación de los pasivos del 2014, que incluye información del registro único de obligaciones y empréstitos. Otras obligaciones en el 2013 que no se habían considerado y esto incrementó la deuda del 2013. Para el 2014, otro rubro de obligaciones que serían cubiertas por la Federación aumenta en 961 millones de pesos la deuda.
Además, para el 2014, ya aparece un apartado de proyectos de prestación de servicios como registro único de obligaciones y empréstitos para el estado de Puebla. Este registro único tipifica una obligación que de origen no es adelanto. Un empréstito es un adelanto de un préstamo. 
La deuda estatal ascendió a 38 mil 944 millones de pesos. Esta es una variación en 4 años del 15 por ciento.
El monto de las 4 administraciones anteriores desde Mariano Piña Olaya a Mario Marín llegó a 23 mil millones de pesos. Todos esos cuatro períodos juntos, la de Rafael Moreno Valle 38 mil millones de pesos. Lo que incrementó en 15 mil millones de pesos, esto significa un aumento de 65% de esos 23 mil. Desde Mariano Pila Olaya subió 106%.
El estado de la deuda pública directa y avalada o contingente a cargo del gobierno del estado de Puebla y de los municipios al 31 de diciembre del 2014 alcanza los $8,775,906,388.32, de acuerdo a datos publicados el viernes 6 de marzo por la Secretaría de Finanzas en medios nacionales.
La publicación no incluye los pasivos derivados de la contratación de los Proyectos de Prestación de Servicios adquiridos por el gobierno de Puebla, ya que la ley no los obliga a presentar esta información; misma información que el todavía secretario de Finanzas, Roberto Moya, prometió entregar durante su pasada comparecencia a los legisladores locales.
Eso sin contar los esquemas llamados PPS, que el gobierno estatal se empeña en no considerarlos como  deuda; sin embargo, se tienen que pagar a largo plazo. 
En esto contexto, la deuda estatal crece a pesar de las campañas publicitarias para tratar de justificar lo contrario.