El arte ha regresado a México. ¡Qué viva el arte! Bienvenido, Morante, a quien el público de la México ha tratado como debe ser, exigiéndole como figura que es, al grado de forzarle a regalar un reserva —que no sobrero— para poder destapar el tarro de las esencias, perfumar y llenar de aroma de toreo bueno, del quintaesenciado que sólo tienen los toreros de pellizco, de gracia pinturera; los asevillanados que lo traen de ahí, de la tierra de la gitanería, fueron verónicas, chicuelinas y naturales a un toro que cabreaba y al que con doblones de mando Morante puso a cita con la muerte en la suerte de matar recibiendo por 2 veces 2, fallando para dejar en ovación una faena que pudo haber sido de escandalera. 
Como definitivo e indiscutible triunfador ha salido por la puerta del “Encierro” Octavio García, el llamado “Payo”, quien con su triunfo deja constancia fehaciente del buen sitio que ha logrado a base de torear mucho y frecuente, por algo es el actual líder del escalafón taurino de estos lares en los que de verdad campea, sin mucho ruido ni mucha promoción o presencia en los medios, sin apoyos, encerronas o mano-a-mano sensacionalistas, es decir, con toreo de entrega y valor.
Durante la misma corrida y en la transmisión por TV se vio a un Alejandro Talavante, torero que tiene en su bolsillo el pasaporte sellado y con visa para ser torero consentido de la México, quien ahora es manejado por la empresa de Alberto Bailleres y lleva sus poderes en México el buen amigo de esta intolerante casa editorial Mariano del Olmo.
Y a propósito de dueños de la fiesta, con Carlos Peralta en su ganadería de Real de Saltillo en labores de tienta apareció después de su cornada en Pachuca Arturo Macías, en labores de tienta, fueron 6 vacas 6, recordemos que “El Cejas” fue becario de la casa Pasteje en sus años mozos, durante su arranque e inicio de carrera. 
Lamentablemente, así como los toros a veces suelen cambiar de lidia; la vida nos hace cambiar de estado de ánimo y verdaderamente lleno de pena y tristeza es el momento de teclear esas líneas, sorprendidos por la muerte del maestro José María Manzanares, ocurrida en su finca cercana a Cáceres adonde fue encontrado muerto por la mañana del martes, a sólo unas horas de que el lunes por la tarde despidió con bendiciones a su hijo del mismo nombre, José Marí, quien voló a ciudad de México para cumplir importantes compromisos y tuvo que abordar nuevo vuelo de regresar a casa a estar con los suyos. 
El maestro manzanares, sin duda uno de los toreros que conquistó, hizo suya la Plaza México y, con ello, el corazón de la afición mexicana, uniendo su nombre a una lista muy reducida que encabeza Manuel Rodríguez “Manolete” y que incluye en los años recientes a Paco Camino, Enrique Ponce, a Pedro Gutiérrez Moya “El niño de la Capea” y al hoy inolvidable José María.
 
Octavio García, El Payo, autentico e irrefutable triunfador de la primera de Temporada Grande en la México, con el corte de 3 orejas 3.
 
 
En la foto, durante el sorteo de los de Jaral de Peñas, de los Barroso, para la del sábado pasado en Pachuca; vemos de perfil a Mariano del Olmo, quien ahora apodera a Ale Talavante, al poderoso apoderado y empresario hispano Luis María Garzón, Mario del Olmo, apoderado de Juan Pablo Sánchez, y al popular CRV, señor y dueño del Internet taurino en España. Estos son, sin duda, ahora que el bigotecano Herrerias empieza a chochear, los nuevos señores de la fiesta en México.
 
Arturo Macías, en labores de tienta en la ganadería de Carlos Peralta; a la izquierda de la foto, otro poderoso de este país, el controvertido Raúl Salinas de Gortari.
 
La foto es verdaderamente histórica y su contenido de gran valor. El maestro de toreros y torero de toreros es sacado a hombros de la Real Maestranza de Sevilla, a hombros, nada más y nada menos que Juan José Padilla, cuando éste aún no sufría la lesión con pérdida del ojo izquierdo; entusiasmados, participan en la escena los también matadores de primera línea José Miguel Arroyo Joselito, Jesús Díaz El Cid, mientras Antonio Barrera le sostiene el muslo; y atrás, un muy expresivo, Miguel Baez Litri.
 
Torero para toreros, aunque alguien corrigió “Figura para figuras”, se ha ido un gran maestro. Descanse en paz José María Dols Abellán.